* Por Carolina Zakrajsek, VP de Estrategias en TBWA Colombia.
No me gusta el concepto de “hemos avanzado”. Es el “lo importante es participar” del ámbito laboral. Es verdad que cuando comencé a trabajar en publicidad, casi no había referentes mujeres en ningún área. En ese entonces era muy joven y no noté esto. De hecho, aún no era consciente de las diferencias inherentes al género presentes en todos los espacios de la vida. Varias agencias, abusos de poder y una cuarta ola de feminismo después, comprendí que nos tocaba la peor parte.
Sí hubo un gran cambio. Hoy en día, hay mujeres líderes en muchos espacios, hay igualdad salarial en varias empresas, hay (¡aunque usted no lo crea!) Directoras Generales Creativas en más de un país de la región. Existe incluso publicidad de productos masculinos que cuestionan el machismo tóxico que ha prolongado años y años de sentimientos de inferioridad impuestos a las mujeres en el mundo en general.
Pero como expertos en tendencias que somos, sabemos que las tendencias suelen correr dos destinos: mueren como modas o se convierten en realidades a largo plazo. Y para que lo segundo suceda, hay que seguir impulsándolas. Por eso, este es el peor momento para frenar, para conformarnos con que ya haya CEOs mujeres. Por eso el “hemos avanzado” me aburre, me parece derrotista. Falta muchísimo para llegar a la igualdad, ese concepto tan simple y a la vez tan complejo para muchos.
No hay igualdad, por ejemplo, mientras los hombres no tengan más días de licencia por paternidad. Latinoamérica se destaca por sus paupérrimas leyes en relación a este tema. Mientras las mujeres tengan meses de licencias por maternidad y los hombres solo unos pocos días, siempre habrá un desubicado -o desubicada- que piense en cómo estas ausencias pueden afectar su negocio, en vez de lo injustas que son estas leyes.
Me cansa escuchar a los que se quejan de los eventos solo de mujeres. Dicen que nosotras mismas nos autoexcluimos. Pero ¡por favor!, mientras haya desigualdad, habrá espacios de empoderación. Esto es verdad para todos los grupos oprimidos -que somos muchos- desde que el Hombre es Hombre (aquí sí utilizado en su expresión más amplia, no sólo de género).
Igualdad no es algunas mujeres en cargos importantes. Tampoco hay igualdad mientras los salarios sean iguales pero los principales puestos los tengan hombres. Porque sí, muchas empresas dan los mismos salarios sin importar el género, pero los cargos históricamente mejor pagos, como son el de DGC o VP Creativo, siguen siendo ocupados por hombres en abrumante mayoría. Hasta donde sé, en Colombia, por ahora, este se da en el 100% de los casos.
Pero lo más importante es esto: ni siquiera sería igualdad si el 50% de los cargos importantes fueran ocupados por mujeres. Igualdad sería sostener porcentajes de ese estilo en el tiempo y si el género deja de ser un tema. No hay que frenar porque logramos algo, incluso si es bastante. No hay que detenerse en discusiones obsoletas sobre por qué el Día de la Mujer sí o el Día del Hombre no. Hoy más que nunca hay que seguir, al menos hasta el día en que mujeres escribiendo notas por el Día de la Mujer sea absolutamente irrelevante.
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